Nunca nos dimos cuenta cuando o donde. Lo cierto es que en algún momento fuimos paladeando lentamente algunos versos desconocidos, una descripción luminosa, la trama cerrada de un drama, la ventura de la comedia.
Los libros se fueron convirtiendo en territorio conocido, menos crípticos, mas amables. Se incorporaron a nuestra vida y cuando quisimos acordar se volvieron imprescindibles, entrañables compañeros.
De esa maravillosa aventura conservamos referencias y referentes.
Recordamos a quienes nos revelaron coordenadas insospechadas, nos alertaron de vericuetos imprevistos, nos amojonaron el camino haciendo posible su trayecto, nos dejaron sorprender por el juego de la vida y la literatura.
La recordamos cuando esta partiendo y la recordaremos siempre al leer un vibrante párrafo de Shunko, o cuando pronunciemos un sencillo verso de Machado o razonemos para desentrañar un laberinto más entre los laberintos de Borges.
Desde que en la temprana adolescencia nos llevó a descubrir las cosas bellas y profundas del pensamiento y la imaginación humana se estuvo quedando entre nosotros.
Cerremos los ojos un instante, dejemos fluir el tiempo vivido y que de nuevo venga su voz a recitarnos:
“Y al cabo, nada os debo; debéisme cuanto he escrito.
A mi trabajo acudo, con mi dinero pago
el traje que me cubre y la mansión que habito,
el pan que me alimenta y el lecho en donde yago.
Y cuando llegue el día del último viaje
y esté a partir la nave que nunca ha de tornar,
me encontraréis a bordo ligero de equipaje,
casi desnudo, como los hijos de la mar.” Antonio Machado
Gracias querida Chacha!!
Los integrantes del Equipo Directivo junto a todo el personal de la Escuela de Educación Media 203 participan de este modo sus sentimientos por la pérdida física de la primera Directora Prof. Haydee Illescas.-
